Hermosos dibujos hechos a mano, con delicadeza y sensibilidad. Desde edificios y monumentos emblemáticos a
	detalles que nunca pasan inadvertidos. Una vez pintado queda para siempre un recuerdo único e irrepetible de la ciudad.
	La concentración, la combinación de los colores y el momento de intimidad ayuda a recuperar la serenidad. Este libro es
	ideal para: Regalarse a uno mismo Regalar a quién no conozca todavía la ciudad Regalar a quién la haya visitado y
	quiera llevarse un recuerdo